Como
edificios civiles destacan la Casa de los Salazar, en la plaza
de San Francisco, y Casa de los Falcón Morote, en la calle Falcón. Son
construcciones dieciochescas de sencilla estructura y patio interior con
columnas, lo mismo que la Casa del Conde (llamada así porque fue
construida por el Conde de Floridablanca) y que en la actualidad está
siendo restaurada para convertirse en el Museo de Semana Santa y Tamborada de Hellín.
El Museo Comarcal. El Museo Taurino Cañamón, que muestra un recorrido por la historia taurina de Hellín, destaca la maqueta de la plaza de toros, y próximamente el Museo de Semana Santa y tambor(Agosto de 2008).
La Iglesia Parroquial de Santa Maria de la Asunción. Empezó su construcción el el año 1499, siendo la primera iglesia de tipo columnario de toda la Diócesis de Cartagena.
Hay que destacar que no ofrece crucero y en cambio internamente quedan
las naves perfectamente definidas y separadas por unos soportes
cilíndricos. La capilla mayor se articula con cinco paños y bóveda
estrellada. La construcción de las capillas laterales corresponde a
distintas épocas, siendo la mayoría renacentista y alguna gótica. La
portada del exterior es sobria y bien trazada, con el hueco de entrada
adintelado y sin ningún tipo de remate superior, fechándose su
construcción en los finales del siglo XVI o los comienzos del XVII. La
torre situada junto a la cabecera posee un remate barroco del siglo
XVIII.
Lo que actualmente es el Centro Cultural municipal fue un antiguo convento de Clarisas. El edificio es una construcción del siglo XVII, el cual se construyó sobre las antiguas casas de su fundador el bachiller don Luis de Caravaca. El salón de actos ocupa lo que fue la antigua iglesia, que consta de nave única, cubierta de bóvedas de arista y presbiterio de planta cuadrada. El claustro presenta en el cuerpo bajo tres arcos. El resto del edificio está hoy en día recuperado y restaurado.
El Convento de los Padres Franciscanos. El templo es de nave única, con algunas bóvedas de crucería gótica. Recientemente se han recuperado tres arcos situados en el acceso lateral, los cuales pueden ser del siglo XVII. El claustro, de fines del siglo XVI, es de planta cuadrada y soluciones renacentistas. En la cabecera del templo destaca un camarín-transparente rococó de los años 1760-1770, con planta centrada octogonal, cúpula de aspecto estrellado y decoración a base de ricas yeserías rococó doradas. El pavimento, del tipo valenciano, ofrece escenas costumbristas y cacerías enmarcadas entre rocallas. En el templo se conserva una Dolorosa de Francisco Salzillo y una copia de la titular, la Concepción, también de Salzillo.
Lo que actualmente es el Centro Cultural municipal fue un antiguo convento de Clarisas. El edificio es una construcción del siglo XVII, el cual se construyó sobre las antiguas casas de su fundador el bachiller don Luis de Caravaca. El salón de actos ocupa lo que fue la antigua iglesia, que consta de nave única, cubierta de bóvedas de arista y presbiterio de planta cuadrada. El claustro presenta en el cuerpo bajo tres arcos. El resto del edificio está hoy en día recuperado y restaurado.
El Convento de los Padres Franciscanos. El templo es de nave única, con algunas bóvedas de crucería gótica. Recientemente se han recuperado tres arcos situados en el acceso lateral, los cuales pueden ser del siglo XVII. El claustro, de fines del siglo XVI, es de planta cuadrada y soluciones renacentistas. En la cabecera del templo destaca un camarín-transparente rococó de los años 1760-1770, con planta centrada octogonal, cúpula de aspecto estrellado y decoración a base de ricas yeserías rococó doradas. El pavimento, del tipo valenciano, ofrece escenas costumbristas y cacerías enmarcadas entre rocallas. En el templo se conserva una Dolorosa de Francisco Salzillo y una copia de la titular, la Concepción, también de Salzillo.
El Santuario de Nuestra Señora del Rosario, del arquitecto local Justo Millán, de tipo ecléctico y construido sobre la antigua mezquita de la ciudad. En la actualidad ha sido declarado Bien de Interés Cultural, que cobija a la Patrona de la Ciudad.
La Ermita de San Rafael, patrón de la ciudad.
La Iglesia Parroquial del Sagrado Corazón de Jesús que custodia imágenes de semana santa como Santa Maria de las Penas y el Cristo de la Coronación de Espinas (Obra de José Hernández Navarro).
La capilla del colegio de los Padres Terciarios Capuchinos.
La Parroquia de San Roque del Siglo XVIII, que custodia al veneradísimo Cristo de Medinaceli, los Azotes y a Nuestra Señora de la Esperanza. Recientemente, gracias a unas obras de restauración, se ha recuperado en dicha parroquia un retablo de finales del S. XVI, siendo dicho retablo el más antiguo conservado en la ciudad.